Truchas con jamón
No están los pescados de río entre mis favoritos, me parecen bastante insípidos y por si fuera poco tienen mas espinas que los de mar, o eso me parece a mí; no obstante, las truchas sí que figuran entre los asiduos a nuestra mesa, siempre ayudados con jamón, bacón o algún otro complemento que les de más sabor.
Estas truchas de pisci, no tienen nada que ver con aquellas arcoiris que pescábamos de furtivos en el Tormes y no necesitaban ni jamón, con un poco de sal y bien frititas deliciosas.
Aclaración: ya nos hemos hecho mayores y hemos dejado de ser furtivos, bueno lo dejamos mucho antes de ser mayores, cuando comprendimos que aquello no estaba bien y empezamos a madrugar en vez de trasnochar. Todos hemos sido jóvenes.
Ingredientes para 4 personas:
- 4 truchas asalmonadas sin la espina central (esto es trabajo del
pescadero)
- 4 lonchas finas de jamón entre velado,
razonablemente bueno, cuanto mejor, mejor.
- 4 lonchas finas de beicon ahumado
- 4 rodajas muy finas de tomate maduro
- Harina para rebozar
- Aceite y sal
Elaboración:
Abrimos las truchas en libro y las salpimentamos con cuidado, pues el jamón y el beicon ya llevan sal, ponemos encima de ambos lomos las lonchas de jamón y beicon, que deben deben ser bien finas para que se pasen en la fritura (el entrevelado contribuirá a que el tocino las dé grasa y queden más sabrosas), ponemos también la rodaja de tomate, partida a la mitad para que nos cubra todo el lomo, a continuación las cerramos y pasamos por harina de rebozar (si es necesario podemos cerrarlas con un palillo), cuando el aceite esté ligeramente caliente las vamos friendo, por ambos lados hasta que la piel quede dorada, pero no quemada, esto lo conseguiremos con una temperatura media alta, (en mi vitro, las pongo del 1 al 10, en el 7).
Una vez fritas,las vamos sacando a un plato con papel absorbente y las dejamos en un lugar caliente hasta el momento de servir.
Guarnición:
Nos vendrán muy bien unas " patatas sudadas", como estas:
Pelamos y partimos en aros una patata mediana por cada trucha, así como una cebolla para todas, las ponemos a freír a fuego muy lento, con un poco de sal y pimienta molida, alternando cebolla y patatas.
Cuando estén tiernas las escurrimos y colocamos una porción en cada plato junto con su correspondiente trucha.
Sugerencias útiles:
Para que las patatas suden debemos taparlas durante el proceso de cocción y como tardan en hacerse más que las truchas, sería bueno que las hiciéramos al principio.
A veces, aparte de la espina central, quito todas las espinas que puedo del lomo, con unas pinzas que tengo para estas ocasiones, es un trabajo pesado, pero compensa a la hora de comerlas.
También suelo cortar el jamón y el beicon en trozos pequeños y lo distribuyo por todo el lomo.
Ambas cosas empecé a hacerlas cuando mis criaturas eran pequeñas para que les resultara más fácil comerlas y ya se ha quedado como una costumbre.
Trucha arcoíris con salsa de naranja
Al precio que se está poniendo el pescado y siempre pensando en las fiestas que se nos avecinan, o en cualquier otra reunión entre familiares o amigos, puede ser una solución para no salirnos del presupuesto, sustituir los pescados tradicionales, como puedan ser: lubina, merluza, besugo, etc., por otros más asequibles pero igual de ricos. Solo nos lo tenemos que currar un poco preparando una buena condimentación, los más hábiles un emplatado lucido, y quedaremos como reyes con nuestros invitados por menos dinero del que pensábamos.
Ingredientes para 4 personas:
- 1 trucha arcoíris, si pasa del kilo no importa.
- 150 grs. de jamón serrano, que tenga un poco de tocino.
- 1 naranja, 1 limón, 1 cebolleta.
- 1 lata pequeña de pimientos morrones.
- Salsa de soja.
- Aceite, sal y pimienta negra recién molida.
- Guarnición: patatas al horno con especias.
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º, con grill y si el horno de aire también.
Ya hemos pedido al pescadero que nos abra la trucha en libro y nos quite la espina, también lo podemos hacer nosotros pero es muy engorroso y el pescadero tiene más práctica. Procedemos a limpiar su interior con ayuda de un papel de cocina, es tan escurridiza que mejor así.
Preparamos una mezcla, a parte iguales, de zumo de naranja, limón y salsa de soja.
Ponemos en la placa del horno un poco de agua en el fondo, y encima una lámina de papel de hornear, extendemos el pescado abierto encima, lo salpimentamos y vamos tapando con las lonchas de jamón, unas tiras de pimiento, unas tiras de cebolleta, y la mitad de la mezcla de naranja, limón y soja que tenemos preparada. Cerramos la trucha y dejamos unos minutos en reposo.
Partimos la cebolleta en juliana, y los restos de naranja y limón en trocitos (lo que queda después de exprimida la naranja y el limón), los ponemos a rehogar en una sartén con un poco de aceite no demasiado caliente, dejamos que sofría lentamente y añadimos un chorrito de vino blanco y el resto del zumo, dejamos que cueza lentamente hasta que reduzca un poco la salsa.
Una vez la salsa a punto la colamos y repartimos sobre la trucha, ponemos sobre la trucha, antes de meterla en el horno un papel de plata y la introducimos en el horno. No es necesario que el papel tape completamente el pescado, simplemente que lo proteja del exceso de calor. Después de 12 o 15 minutos nuestro pescado estará en su punto, antes lo habremos destapado para que se dore por la superficie.
Las patatas, como tienen más tiempo de cocción que el pescado, podemos cocerlas durante 8 o 10 minutos, antes de pasarlas a hornear.
Sugerencias útiles:
Solo una, que no nos dejemos deslumbrar por el efecto Navidad, estas fecha se pasan, el año continúa y el futuro no está escrito.
Truchas al horno con majado
No sé como alimentan a las truchas en las piscifactorías, pero la verdad es que por lo creciditas que están parecen tiburones, han desaparecido aquellas truchas de ración (150/200 grs. más o menos), con su carne asalmonada, que daban el pego, porque parecían las añoradas arcoiris del Tormes, ya sabíamos que no eran las mismas, pero lo parecían. Al menos, en la pescadería que yo compro, han desaparecido, lo malo es que te porfían que son las mismas, pues no, no son las mismas ni aunque las pinten los lunares.
Ingredientes para 4 personas:
- 2 truchas
- ½ cebolla, 1 guindilla cayena
- 2 ajos
- 1 limón
- 1 ramillete de perejil
- 1 ramillete de albahaca
- 1 cucharada de almendras crudas
- 1 botellin de cerveza o vino blanco
- Aceite, sal y pimienta negra
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º con grill.
Lavamos las truchas y las dejamos que escurran mientras preparamos el majado.
Ponemos en el vaso de la minipimer, 2 ajos, un puñado de albahaca, 1 puñado de perejil, sal y 1 vaso de aceite, lo trituramos y reservamos.
Hacemos un corte en el lomo de las truchas (si son muy grandes 2 cortes), las salpimentamos por dentro y por fuera, las rociamos con un poco de zumo de limón y las rellenamos con una parte del majado, introducimos dentro de los cortes que hemos efectuado ½ rodaja de limón y el resto del majado que nos haya sobrado.
En una sartén con un fondo de aceite, hacemos un pochado con la cebolla, la cayena y el vino blanco o la cerveza, que pondremos en el fondo de una fuente de horno.
Colocamos las truchas en la fuente y la introducimos en el horno entre 10 y 15 minutos, depende de cómo nos gusten y siempre con el horno precalentado. Pasado ese tiempo las sacamos y las dejamos reposar hasta el momento de servirlas.
Acompañamiento, unas patatas previamente cocidas, y con un golpe de horno a media cocción del pescado.
Sugerencias útiles:
Es fundamental que el horno esté bien caliente, para que empiece el guiso nada más meter la bandeja.
No las dejéis al calor una vez hechas, pueden secarse, porque el calor residual continua cocinándolas.
Al principio de la cocción podemos poner la bandeja en la parte central del horno, y los minutos finales la subimos un poco para que se doren.
Trucha arco iris rellena al horno
Cuando parecía que las truchas arco iris habían desaparecido de los lineales de las pescaderías, resulta que la cosa estaba en que yo no miraba bien y claro, pasaba de largo.
Estas truchas se llaman así, no por el color asalmonado de su carne, sino porque su piel está moteada de puntitos que no son precisamente de muchos colores vistos tal cual, pero si las miras a la luz del sol lo parece. Ahora son todas de piscifactoría, pero cuando podíamos pescarlas en el Tormes, mucho más pequeñas que ésta, las puníamos en fila sobre la hierba y podíamos observar su colorido.
¡¡Qué tiempos!!
Ingredientes para una trucha grande:
- 1 trucha de 600 grs.aprox.
- 1 vasito pequeño (150 ml. aprox.) de zumo de limón y aceite de oliva a partes iguales
- Jamón serrano en lonchas
- pimientos del piquillo
- Aceite, sal y pimienta negra recién molida
Elaboración:
Pedimos en la pescadería que nos limpien la trucha de espinas y dejen los lomos por separado. Nosotros los partiremos en las raciones que nos parezca. Los salpimentamos y sazonamos con el vino y el limón, los dejamos reposar 15 minutos aproximadamente.
Precalentamos el horno con el grill a 180º
Escurrimos los lomos y rellenamos los mismos con unos pimientos del piquillo en tiras o troceados y un poco de cebolla muy picada, encima ponemos el jamón, tapamos con el otro lomo y lo colocamos en una fuente de horno. Rociamos por encima con la mezcla del marinado y ponemos una loncha de jamón sobre los mismos.
Una vez que el horno esté caliente introducimos la fuente y horneamos durante 15 minutos. Si os gusta el pescado muy pasado añadís un poco más de tiempo.
Sugerencias útiles:
La trucha la podéis partir, o no, a mi me resulta más cómodo hacerlo así, porque una vez horneada se destroza mucho el pescado al partirlo.
Los pimientos de la guarnición surgieron del congelador cuando me parecía que iba a ser poca comida ¿por qué los hijos cuando vienen a comer no avisan con tiempo?
Truchas al horno
Encargué a mi chico que comprara unas truchas, para variar un poco, y también porque era fin de més y hay que consensuar con el bolsillo. El caso es que se me presentó con 2 truchones que pesaban 900 grs., cada uno, eran unas magníficas truchas arco iris que nos comeremos en dos veces, porque con una para los dos, tuvimos más que suficiente.
Ni que decir tiene que la receta que paso es para tamaño de ración.
Ingredientes para 4 personas
- 4 truchas de ración
- 8 lonchas de jamón, cuanto mejor, mejor
- 8 lonchas de beicon
- Medio vaso de vino blanco
- Zumo de 1 limón
- Aceite
- 1 ajo, perejil, sal y pimienta negra recien molida
Elaboración:
En este caso y al ser un pescado de río, no es necesario congelarlo previamente.
Precalentamos el horno a 180º calor arriba y abajo.
Lavamos el pescado, lo dejamos escurrir y antes de aliñarlo lo secamos con papel de cocina
En un cuenco ponemos los ajos machacados, el perejil muy picado, el aceite, el zumo de limón y el vino blanco, lo mezclamos bien y añadimos un poco de sal, no mucha que las truchas llevaran la suya.
Secamos las truchas con papel de cocina y las colocamos abiertas en la placa del horno, las salpimentamos y rellenamos con el jamón, las vamos cerrando y ponemos encima de las mismas las lonchas de beicon. Rociamos el pescado con una parte de la mezcla que tenemos en el bol y reservamos el resto.
Las metemos en el horno bien caliente, durante 5 o 6 minutos y pasado este tiempo, si vemos que se han quedado secas echamos el resto del contenido del bol y las dejamos entre 8 y 10 minutos más, o hasta que acaben de hacerse.
Si sois como nosotros, muy de mojar en las salsas, aunque no estén secas podéis echar el resto del mójili, alguien lo agradecerá.
Si os fijáis, son como una truchas a la navarra, pero al horno, que así era como yo las iba a hacer, pero al ver aquel monstruo, que no me cabía en sartén alguna, tuve que improvisar y salieron ricas.
Sugerencias útiles:
Podéis, si os gusta, pedir al pescadero que os quite las espinas, pero yo creo que quedan más jugosas con ellas, y sobre todo si van al horno.
En cuanto a la piel, que en los pescados grandes, últimamente se suele quitar, opino lo mismo. Pero ya sabéis que mis opiniones son las de una aficionada, luego vienen los maestros y nos desbaratan las teorías, y a ver quien les discute, que para eso han estudiado.
Ya lo he dicho en alguna ocasión, con el fin de ahorrar un poco de trabajo, suelo forrar las bandejas de horno con papel de aluminio o papel especial para tal fin. Con un poco de cuidado la bandeja queda para pasarla un paño húmedo.