Sopa de fin de mes

Sopa de fin de mes llamaba mi madre a estas sopas, que resultaban ser calentitas y sabrosonas, no tenían demasiada buena acogida entre mi hermano y yo, pero había que comérlas, y en eso mi madre era muy convincente, lo que no se tomaba a medio día era para por la noche y así las podíamos seguir pasando durante el resto del tiempo. No recuerdo que nunca nos hiciera tamaña faena, pero nosotros, por si acaso,  a comer y a callar. He sustituido el jamón que mi madre ponía por beicon, que me parece más sabroso y además, si son de final de mes, que se note.

Elaboración:

Ponemos un poco de aceite en la cazuela, junto con el beicon el chorizo y los ajos, lo ponemos a fuego muy moderado para que no se nos queme.

Cuando se hayan frito los ajos, incorporamos el repollo troceado lo más menudo posible, las patatas chascadas pequeñas y la zanahoria en cuadraditos, rehogamos con el resto de los ingredientes hasta que el repollo baje un poco, lo regamos con un chorrito de vino blanco.

Añadimos el caldo de jamón y dejamos cocer hasta que esté en su punto, las dejamos reposar y servimos.

Sugerencias útiles:

La receta para el caldo de jamón, la podéis encontrar en Sopa de ajo/Sopa castellana, de cualquier forma no nos vamos a cortar las venas por usar un brik de caldo, o una pastillita.

Cortad el repollo lo más menudo posible, y os aseguro que siempre será demasiado largo, yo creo que crece en la cazuela.