Sopa de chirlas

Nunca creí que una sopa tan simple pudiera dar tanto juego, yo le doy todo el mérito a las chirlas de las que soy una enamorada.

Ya se comía esta sopa en casa de mi madre y, seguro que de mi abuela. Y cuando vivíamos en Madrid, también yo la hacía con frecuencia, pero en Valladolid, es casi una misión imposible encontrar chirlas. La he hecho con almejas buenas, malas y regulares, pero el resultado no ha sido el mismo.

Si alguien pasa por Valladolid, ahora que hemos inventado los pinchos y todo el mundo nos visita, por favor: ½ kilito de chirlas que se las pago.

Bueno nos ponemos manos a la obra que si no, no acabo.

Elaboración:

Lavar las chirlas a conciencia, pues suelen tener tierra.

Poner en una cazuela la cantidad de agua que vayamos a utilizar para la sopa y un poco más "para la cazuela", decía mi madre, echar sal y una hoja de laurel, cuando el agua empiece a hervir echar las chirlas y dejarlas cocer para que se abran, echar los fideos hasta que estén al punto, los fideos cabellin se hacen en un abrir y cerrar de ojos.

En una sartén poner un fondo de aceite, y antes de que se caliente demasiado echar un ajo cortado en trocitos al gusto, dejar que se fría ligeramente y apartar del fuego, cuando el aceite esté templado echar un poco de pimentón y todo ello a la cazuela.

Probamos de sal y si nos parece un poco insípida añadimos la pastilla de caldo, pero tengamos en cuenta que es una sopa de sabor muy suave. El mar en tu plato.

Sugerencias útiles:

Si decides usar la pastilla de caldo, no la eches toda de una vez, desmenúzala poco a poco y vas probando, hasta conseguir el sabor deseado.

Para medir el agua de una sopa, yo tengo una forma un tanto curiosa de hacerlo, en la cazuela donde vamos a hacerla, pongo 4 platos de agua y 1 más para la cazuela, esto eran cosas de mi madre que no dan mal resultado.

El pimentón es una pizca, menos de una cucharadita pequeña, y para nada tiene que tostarse, por lo cual el aceite hay que de dejarlo enfriar pero no demasiado; al principio y harta de que el pimentón se me quemara siempre, pensé: si el pulpo a la gallega lo lleva crudo ¿por qué mi sopa no?, dicho y hecho espolvoreé un poco sobre la sopa cuando cocía y estuvo bien. Pero me gusta más pasado por la sartén.

Por todo lo que va escrito parece muy complicado, pero después de los huevos fritos, es la receta más fácil que he hecho en mi vida.