Pollo estofado con alcachofas

Al comprar las alcachofas, comprobad que están duras y turgentes y, que tienen las hojas muy apiñadas. No creais que es tan fácil, a mi últimamente, estas magnificas flores, me tienen la guerra declarada, por lo que con frecuencia me paso a las congeladas, no son lo mismo pero hacen un apaño.

Por cierto, no combinan bien con el vino, lo que no me importa, yo soy bebedora de cerveza

Elaboración:

Lavamos los trozos de pollo, los dejamos escurrir y secamos con un papel de cocina.

Ponemos un poco de aceite en una cazuela y doramos el pollo debidamente salpimentado.

Partimos las verduras, cebolla, pimientos y zanahorias, de la forma que más nos gusten, en mi caso en trozos pequeños, los echamos por encima del pollo para que rehogue todo junto, lo dejamos mas o menos 15 minutos para que el pollo vaya cogiendo todos los sabores.

Machacamos en el mortero los ajos y el perejil incorporamos el vaso de cerveza y lo agregamos a la cazuela, removiendo y dejando que cueza.

Si es necesario echamos un poco de agua, o caldo de pollo si tenemos, pero tanto el pollo como las verdura sueltan agua y a lo mejor no hace falta, no obstante hay que vigilar que no se seque.

Pasados unos 20/25 minutos el pollo estará casi hecho, en ese momento partimos el calabacín en dados hermosos como si fueran patatas y el tomate en rodajas, dejamos cocer unos minutos más hasta que el calabacín esté a nuestro gusto, espolvoreamos con el pimentón y removemos, dejamos reposar y listo para servir.

Como a todo el mundo, por lo menos a mi pequeño mundo, no les gustan las alcachofas, yo las cuezo aparte, las rehogo y las pongo como una guarnición. Pero si comemos sólos mi Chico y yo, las incorporo al guiso, al mismo tiempo que el calabaciín, y previamente cocidas.

Sugerencias útiles:

Cualquier guiso de pollo troceado y previamente salteado durante 10 minutos, su tiempo de cocción no debe pasar de otros 25 minutos más, ya que tendería a secarse. Cosa distinta es que el pollo sea de corral, pero de corral de verdad.

Aquí no se tira nada:

Dicen los que saben de esto que, el caldo de las alcachofas tiene propiedades curativas, yo no tengo ni edea, pero seguro que si preguntáis alguien os sacará de la duda. Sin conocer sus propiedades, reconozco que el caldo fresquito, con una gotas de limón no me disgusta, a lo mejor y, sin saberlo me estoy curando algo.