Patatas con Gambas y Champiñones
Ingredientes para cuatro personas:
- 4 patatas grandes
- 250 grs. de champiñones, a mi me gustan los grandes, así los parto a mi
gusto.
- 250 grs. de gambas arroceras, a veces hay suerte y son hermosas.
- ½ cebolla mediana, 1 ajo hermoso
- ¼ de pimiento verde italiano (de los delgaditos)
- 1 vasito pequeño de vino
- 2 huevos duros
- Aceite, sal y 8/10 granos de pimienta negra
- 1 litro de caldo de pollo o de pescado suave (si no tenéis agua)
Elaboración:
Picamos a nuestro gusto, pero de tamaño similar el pimiento verde y la
cebolla, lo reservamos.
Chascamos las patatas de un tamaño que quepan sin problemas en la cuchara, las reservamos en un bol con agua.
Limpiamos los champiñones con un paño húmedo, y dependiendo del tamaño los cortamos a medios o cuartos.
Quitamos las cabezas a las gambas, las pelamos y reservamos.
Ya tenemos todo preparado para empezar a guisar
Ponemos una cazuela amplia al fuego con un fondo de aceite, antes de que se caliente, añadimos el pimento y la cebolla, lo sofreímos a fuego lento para que no se nos queme. Cuando estén a medio hacer añadimos las patatas y dejamos que siga sofriendo todo junto.
Machacamos en un mortero el ajo, el perejil y los granos de pimienta, lo diluimos con un chorrito de vino blanco y se lo añadimos a la cazuela, dejamos que evapore el alcohol. A continuación cubrimos las patatas con el caldo (o agua) caliente y dejamos que cueza todo junto a fuego lento con la cazuela tapada.
Ponemos una sartén al fuego con una pizca de aceite y cuando esté caliente añadimos los champiñones con un poco de sal, los rehogamos y dejamos que suelten su agua, los apartamos en un plato y cuando estén las patatas casi cocidas se los añadimos, junto con su caldito.
En la misma sartén ponemos las cabezas de las gambas, las rociamos con una pizca de aceite y las aplastamos para que suelten todo su jugo, echamos un poco de agua o caldo y lo colamos en la misma cazuela de las patatas. Dejamos cocer hasta que las patatas estén en su punto, momento en el que echamos las gambas y los huevos duros partidos a la mitad. Tapamos la cazuela y la retiramos del fuego, dejamos que repose unos minutos antes de servir.
Sugerencias útiles:
Me gusta hacer este plato con un caldo suave, puede ser de unas espinas de pescado blanco, o de unos huesos de pollo, aunque pienso que con el sabor que le van a dar los champis y las cabezas de la gambas el sabor está asegurado. Pero ahí tenéis la sugerencia.
La podéis hacer más o menos clara, con o sin huevo, de plato único o como primero, cada cual conoce a quienes se sientan a su mesa.