Marrajo en salsa de tomate
Marrajo, cazón, pez espada y otros peces parecidos dicen que son de la familia de los tiburones y la verdad es que pensarlo ya impresiona, pero si nos paramos un momento nos daremos cuenta de cuántos pescados hay en el mar que serán mucho más feos y agresivos y por ello no dejamos de comerlos.
Yo creo que es mejor comerlos a que nos coman.
Ingredientes para 4 raciones:
- 800 grs. de marrajo
- "salsa de tomate"
- Sal fina y aceite de oliva virgen extra.
Para el adobo:
- 1 cucharadita de comino en polvo
- 1 cucharadita de orégano
- 2 ajos pelados, 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Sal gorda, una cucharadita
- 1/2 vasito de vinagre de jerez
- ½ vasito de agua
Elaboración:
Partimos el cazón a nuestro gusto, en lonchas o tacos, si es para aperitivo los tacos son ideales, pero en un segundo plato quedan mucho más vistosas las lonchas, vosotros decidís.
Lavamos el pescado y lo dejamos que escurra, después debemos secarlo, pues creo yo que coge mejor el adobo. Manías. Lo reservamos.
Preparamos el adobo machacando los ajos en un mortero y mezclando todos los ingredientes, menos el agua y el vinagre, que los reservamos.
Ponemos el pescado en un recipiente, mejor de cristal, otra manía, lo espolvoreamos con un poco de sal fina y un chorrito de aceite de oliva virgen extra, lo mezclamos todo bien e incorporamos el adobo, yo lo hago con las manos, pero podéis emplear una cuchara o cualquier otro utensilio. Una vez todo el pescado bien impregnado lo cubrimos con el vinagre de jerez y el agua, lo tapamos con papel film y lo dejamos en la nevera un mínimo de 30 minutos, lo ideal son dos horas.
Pasado el tiempo lo colocamos en un colador y dejamos que escurra, sin tirar el líquido que suelte.
Ponemos un plato con harina y vamos rebozando el pescado, sacudiendo con la mano el exceso de harina y al mismo tiempo fijando bien la que quede. Esto ya es destreza al límite.
Preparamos una sartén al fuego con abundante aceite, el suficiente para freír, sin derrochar, debemos tener en cuenta que el que nos quede a lo mejor no podemos reutilizarlo, aunque eso ya se verá. Y cuando alcance el calor adecuado vamos friendo las piezas de pescado.
No debemos freírlas demasiado, pues terminarán de hacerse en el tomate y es imprescindible que el pescado no se seque.
En una cazuela de boca ancha ponemos la salsa de tomate que podemos triturar, una vez caliente vamos metiendo las piezas de pescado, dejamos que cueza en la salsa uno o dos minutos y con ese tiempo lo tenemos listo para comer bien calentito.
Sugerencias útiles:
Si en el recipiente donde hemos adobado el pescado quedan restos del mismo, yo se lo hecho a la salsa de tomate, enriquecerá su sabor.
Este es el adobo que yo preparo para las tapitas de cazón de los aperitivos, es aproximadamente como se hace en Andalucía, pero ya sabéis que en cada sitio lo harán como quieran y es lo que debéis hacer vosotros, quitad y poned lo que os parezca.
El aceite que queda de freír el pescado, este pescado y con este guiso, no suele reutilizarse pues suele quedar bastante sucio y con los sabores del adobo, pero si una vez colado veis que no está demasiado quemado, podéis utilizarlo para algún guiso que no os importe que coja estos sabores, por ejemplo unas patatas viudas.