Espaguettis con mejillones y vinagreta

¿Comer pasta en pleno verano? Pues sí, sin ningún problema y deberíamos, como para las legumbres o las verduras que debemos mantener una regularidad en su consumo, adaptando sus guisos a los calores insufribles, o casi, presentándolas en ensaladas fresquitas.

Esto de adaptar las recetas a la época del año, es algo nuevo, porque cuando yo era niña, casi en la Prehistoria, años 40 o 50 del pasado siglo, al menos en mi casa, solo se conocían los macarrones a la italiana, que decía mi padre y los fideos y otras pastas diminutas para sopas y para de contar. Aunque quizás hubiera familias más adelantadas o viajadas que conocían otras cosas.

En pocas palabras, las pastas no engordan, son bajas en grasas y sodio, nos aportan proteínas, vitaminas y minerales; son accesibles por su precio y muy versátiles por la gran variedad de las mismas. En definitiva, son un alimento para tener en la despensa este verano y no privarnos de algo rico y sano.

Esto último se lo debo a Eva, la dietista del "taller de economía doméstica y alimentación", al que he asistido este curso y seguiré el próximo, o eso espero.

Ingredientes para 4 personas:

  • 300 gramos de espaguettis.
  • 200 grs. de mejilloles abiertos al vapor, si los compráis abiertos , mejor pasteurtizados.
  • 3 huevos cocidos.
  • 1 huevo cocido más para la vinagreta.
  • 1 tomate muy maduro.
  • 1/2 pimiento rojo.
  • 1/4 de cebolla.
  • 1 ajo.
  • Aceite de oliva, vinagre, pimienta recién molida y sal.

Elaboración:

Después de limpiar los mejillones, los ponemos en una cazuela con un chorrito de vino o cerveza, poca cantidad, para que se vayan abriendo. Si los habéis comprado pasteurizados, os ahorráis este paso. Cuando estén abiertos coláis el líquido de la cocción y lo reserváis.

En este mismo líquido, habremos de añadir un poco más de agua, cocemos los espaguetis, esto para un italiano no es muy ortodoxo, pero ya veréis que sabor a mar va a tener nuestra pasta. El punto de cocción será a vuestro gusto, yo recomiendo al dente.

Vamos a empezar por el principio, quiero decir haciendo la salsa, para no tener esperando a los espaguetis. 

Cocemos los huevos, no más de 10 minutos desde que el agua empieza a hacer burbujas, los sacamos y refrescamos con agua muy fría.

Troceamos muy menudos el pimiento y la cebolla, y machacamos el ajo, si nos parece demasiado ponemos la mitad, incluso si no nos gusta, lo eliminamos. Si tenéis una picadora manual o eléctrica, os será de gran ayuda, para este menester.

Troceamos también muy menudo uno de los huevos cocidos y mezclamos con todo lo anterior, añadimos a esta mezcla, aceite, sal y vinagre, y si os parece muy espesa añadís unas cucharadas del agua de cocer los espaguetis y los mejillones. Aunque yo, para esto, esperaría a ver el resultado final de la ensalada, a veces no es necesario añadirlo.

Pelamos el tomate, que debe estar muy maduro, lo partimos lo más pequeño que nos sea posible, y con los espaguetis ya colados, los mejillones fuera de sus valvas y los tres huevos restantes cortados a nuestro gusto, mezclamos todo en una ensaladera, lo rociamos con la salsa vinagreta, probamos de  sal y pimienta, rectificamos si fuera necesario y listo.

Sugerencias útiles:

Los 200 gramos de mejillones, supongo que habréis entendido que son sin valvas, de cualquier forma la cantidad puede ser a vuestro gusto.

El caldo que os sobre después de haber cocido la pasta y los mejillones, bien colado podéis guardarlo para otro guiso, por ejemplo unas patatas en ensalada que lleven algún pescado. Espero no pareceros rácana, pero yo ya aprovechaba las comidas antes de que lo pusieran de moda. Niña de la posguerra.

Y aunque la receta es larga y tiene demasiadas letras, es rápida y fácil de hacer, justo lo que nos gusta en verano.