Croquetas de Jamón con leche de almendras
Estas croquetas son las del confinamiento que nos ha presentado el miembro más joven de la familia. Es Pablo para los amigos, y Pablotillo para su tía, la legal (nunca llegué a saber que era eso y ahora que ha crecido no se acuerda).Como os sigo diciendo en esta familia, lo que se dice de hambre no nos vamos a morir, porque ideas no nos faltan, y aquí el chico, revisando las recetas de las comiditas, encontró que le faltaba alguno de los ingredientes, "no pasa nada", se dijo, "la imaginación al poder, y a ver cómo me manejo con lo que tengo en la nevera"
Los ingredientes van a ojo, como los que llevan 25 años en la cocina.
Ingredientes para alguna más de las que veis en la bandeja:
- Jamón en taquitos, lo que había en la nevera
- Leche de almendras
- harina, la que admita
- 1 huevo duro
- 1 o 2 para rebozar
- Pan rallado
- Aceite para hacer la bechamel y más abundante para freír
Elaboración:
No me ha contado demasiado, pero si me ha dicho que siguió un orden aproximado de mi receta, ya os digo, como si llevara 25 años metido en la cocina, con lo que a otros nos costó aprender.
Supongo que empezaría así:
Sartén al fuego con un fondo de aceite, como no tenía mantequilla eliminada.
Con el aceite templado rehogó ligeramente el jamón, sin dejar que llegara a tostarse y a continuación dos o tres cucharadas de harina (no lo recuerda), dejó que se friera todo junto unos momentos.
Sin pensárselo dos veces y como veía que aquello se ponía un poco espeso decidió ir echando leche sin dejar de dar vueltas a la masa, para evitar los grumos y desmenuzó como si fuera sal un poco de caldo de pastilla, "tampoco tengo nuez moscada, pues sin ella, que mi tiuchi me ha dicho que de lo que no hay no se echa"
A continuación picó un huevo duro (que supongo se comería la mitad, porque son su debilidad) y lo mezcló con la salsa.
Y así sin dejar de dar vueltas llegamos al final de la primera parte, que aún tienen que enfriarse.
Una vez fría la masa, se puso con lo más difícil, dio forma a las croquetas las rebozó y a la sartén.
Los resultados en la foto y, como él es un artista de lo moderno, las formas y la colocación son lo de menos, croquetas son, ordenadas no están, pero así son los artistas y a este así es como le queremos.
Sólo una aclaración:
Como es un chico formal, me ha dicho, después de leer la receta, que resistió la tentación de comerse un trozo del huevo duro, y que la única infracción culinaria fue chuparse los dedos cuando terminó, para no desperdiciar la bechamel que se le había quedado pegada en ellos. Yo me creo todo lo que me ha dicho.